Ayer tuvimos la posibilidad de asisir al Conversatorio de Procesos creativos en el arte y la ciencia organizado por las Universidad de Chile a través de sus facultades de Artes, Ciencias Sociales, Filosofía y Humanidades, del Instituto de la Comunicación e Imagen, del Programa Transversal de Educación, del Programa Académico de Bachillerato y la Radio Juan Gómez Millas. Esta actividad convocó al Premio Nobel de Física 1999, Gerard ‘t Hooft, al profesor de la universidad y Premio Nacional de Ciencias 1994, Humberto Maturana, y junto a la cantante y nominada al Grammy Ana Tijoux.
Este llamado “Conversatorio de Juan”, en honor a Profesor Juan Gómez Millas, destacado Rector de la Universidad de Chile, fue guiado por la periodista Soledad Onetto, quien moderó el diálogo sobre ciencia, arte y creatividad a lo largo de dos horas donde participaron distintos académicos del plantel, estudiantes y el público en general.
El Rector de la Universidad de Chile, Sr. Ennio Vivaldi, dio la bienvenida a la actividad y abrió el conversatorio planteando que “…existe una diferencia entre la información y la formación. A la primera se le puede poner un precio, pero a la segunda no, porque es una forma de ver la vida. La creatividad tiene mucho que ver con eso…”
Durante el diálogo se abarcaron las distintas ópticas desde las cuales los invitados observan el fenómeno creativo, destacando el profesor Maturana cuando indicó que “la creatividad no se enseña, se libera. ¿Cómo se deja que los otros seres operen desde su condición básica y creatividad? Dejándolos ser, escuchando las preguntas de los niños, contestando las preguntas de los adultos. No es que se potencie la creatividad, se abre un espacio y según las circunstancias en que estamos es cómo se orienta. Los seres humanos podemos orientar la creatividad hacia lo más hermoso y hacia lo más terriblemente feo”.
En tanto, el Premio Nóbel de Física agregó que “la creatividad es algo muy universal, tanto en las ciencias como en la música y en todos los campos (…) utiliza las experiencias pasadas. Ves cosas de antes, gente que fue creativa antes que tú, y luego vas combinando esas cosas de otra manera y buscas nuevos patrones. Ser creativo significa recombinar lo que ves”.
A su vez, la artista nacional Anita Tijoux señaló sobre el origen de la creatividad que “muchas veces nace del error, de una palabra, un documental o el silencio. Para mí la imperfección permite desarrollar una idea. Cada proceso creativo es distinto”. Seguidamente se permitió señalar la transversalidad con que las disciplinas abordan el proceso creativo a través de una confesión intima: “siempre fui pésima para la física, la matemática y la biología. Pero recuerdo que todas las veces que tuve la oportunidad de hablar con alguien que viene del mundo de las ciencias, fue como que me hablaran de una obra musical (…) La relación cómo se aborda el mundo de la ciencia desde un científico es muy similar a cómo un músico aborda su obra. Es la misma pasión en sus ojos. Creatividad para mí es ese lugar, la profunda pasión desde las entrañas, en que uno va desarrollando respuestas ante la duda permanente que uno tiene, ante esa necesidad que de entender el mundo y entenderlo a través de las obras”.
Maturana acotó que “la creatividad es un fenómeno espontáneo de los seres vivos, porque cada ser vivo tiene en el fondo que inventar su mundo en el momento en que empieza a vivir (…) Si yo le digo a alguien ‘tienes que ser creativo’, lo meto en una trampa. ¿Qué será ser creativo? El escuchar, el dejar aparecer, el respetar al otro, ese es el fundamento de la liberación de la creatividad”.
En una bajada más cotidiana, Gerard ‘t Hooft cerró invitando a los presentes a reflexionar respecto a “que todo lo que usamos en nuestra vida cotidiana ha implicado un proceso creativo implementado por científicos (…) La ciencia está alrededor nuestro. Mientras más entendemos, más felices somos, así que traten de aprender acerca del universo, de los humanos, de los lenguajes y de cómo funciona el mundo”.